Pasar por terapia individual y luego terapia de pareja es muy enriquecedor, aprendes mucho. Elizabeth es estupenda, tiene la paciencia de seguirte en tus avances, explicarte y acompañarte, el que tenga todo programado nos ayuda a manejar tiempos, porque entendemos que cada pareja tiene su propio ritmo, no somos maquinas que en 4 u 8 sesiones se va arreglar tu vida por completo, y ponernos un límite o un tiempo solo nos llena de más ansiedad y de parámetros en un tiempo que quizás a algunos les haya funcionado, pero cada pareja es un mundo diferente. Eso es lo primero que tienen que comprender que el trabajo es de nosotros mismos, en cuan comprometidos estamos y que tan dispuestos estamos a escuchar y trabajar en equipo.

Tuve que llevar primero Terapia Individual porque me encontraba en una posición de mucha ansiedad y depresión, no podía controlarme, le exigía mucho a mi pareja, por todo hacía problema, él ya no quería llegar a casa, prefería irse con sus amigos ahora lo entiendo porque cada vez que llegaba yo estallaba, reclamándole, a veces cosas sin sentido, cuando yo trabaje lo mío y el también lo suyo en terapia individual, cada uno por separado, las cosas mejoraron, entendimos porque nos comportábamos así y eso nos ayudó a entender porque la relación de pareja no estaba funcionando.

Recibimos Terapia de Pareja con Elizabeth y nos fue estupendo, nosotros tuvimos que poner de nuestra parte, pero la guía fue precisa, desde la primera sesión nos indicó que hacer, influye mucho cual es la predisposición que cada uno tiene, porque si ante el primer obstáculo te desanimas imagínate todos los años que tienes que compartir con la pareja, eso lo aprendimos que la actitud es muy importante, la comprensión, la paciencia. Nosotros fuimos muy constantes, asistimos con puntualidad, hicimos las tareas que nos dejaba Elizabeth entre sesión, nuestras citas fueron 1 vez a la semana, nos dábamos el tiempo y realizamos los ejercicios que nos indicó, eso ayudó mucho, por eso digo que el trabajo lo hicimos nosotros y que dependió mucho de que tan comprometidos estábamos con la terapia.